El Día Mundial de la Prevención del Suicidio, se recuerda anualmente el 10 de setiembre con el objetivo de crear conciencia sobre esta problemática que afecta a miles de personas a nivel mundial.

En el año 2019, unas 97.339 personas murieron por suicidio en la Región de las Américas, y se estima que 20 veces ese número, pudo se pudo haber realizado intentos de suicidio.

Los suicidios y los intentos de suicidio tienen un efecto dominó que afecta no solo a las personas, sino también a las familias, las comunidades y las sociedades. Los factores de riesgo asociados al suicidio, como la pérdida laboral o financiera, el trauma o el abuso, los trastornos mentales y por uso de sustancias y las barreras para acceder a la atención médica, se han ampliado aún más con COVID-19.

El estigma social y la falta de conciencia siguen siendo los principales obstáculos para la búsqueda de ayuda para el suicidio, razón por la cual es fundamental la realización de campañas que ayuden a las personas a conocer más acerca del suicidio y las acciones que pueden realizar para salvar la vida de las personas.